Las puertas enrollables son cierres de seguridad compuestos de lamas horizontales fabricadas en aluminio extrusionado o acero galvanizado. El funcionamiento es muy similar al de una persiana, cuentan con unos carriles laterales, el eje que ayuda al articulado de las lamas y un cajón metálico (opcional) para ocultar la recogida de la misma, además de las cerraduras de seguridad situadas en la lama de refuerzo inferior.
Para ofrecer un alto grado de resistencia y seguridad, las lamas que componen este tipo de puertas se fabrican con grosores medios desde 0.6 mm hasta 2 mm (dependiendo del modelo y material de fabricación). Todos los cierres enrollables cuentan con una placa inferior de refuerzo que proporciona mayor rigidez y reduce el combado de las lamas por intentos de intrusión. Por sus características comunes, este tipo de cerramientos le permite proteger su vivienda o negocio con una puerta enrollable compacta y segura.
Gracias a la variedad de materiales de fabricación y al espesor de las diferentes lamas contamos con una amplia gama de modelos que se ajustan a las necesidades y las dimensiones de todos los espacios a proteger.
Las puertas enrollables automáticas son aquellas en las que tras accionar un botón de un mando inalámbrico, un mecanismo las empieza a enrollar y a subir para arriba, dejándolas totalmente recogidas; permitiendo, por tanto, el paso. Como veremos a continuación, estas puertas tienen muchos usos y ventajas.
Aunque no nos percatemos, vemos puertas enrollables automáticas constantemente en nuestro día a día. Pueden instalarse en un sinfín de lugares; algunos de los más comunes son:
Su uso tan extendido es debido a sus múltiples ventajas: